Escándalo en la industria láctea: sancionan a cuatro empresas por incluir lactosuero en la leche entera

La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) impuso millonarias sanciones a las empresas Gloria, Lactalis, Hacienda San Mateo y Sabanalac tras descubrir que comercializaban leche con lactosuero sin informarlo a los consumidores.
La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) de Colombia ha impuesto sanciones por más de 21.000 millones de pesos a cuatro compañías del sector lácteo por prácticas engañosas en la comercialización de sus productos. Gloria, Lactalis, Hacienda San Mateo y Sabanalac fueron señaladas por vender leche etiquetada como entera higienizada, cuando en realidad contenía lactosuero, un subproducto derivado del queso, afectando así la transparencia del mercado y la confianza de los consumidores.
El uso no declarado de lactosuero permitió a estas empresas reducir costos, obteniendo ventajas competitivas desleales frente a otras compañías que cumplen con las regulaciones sanitarias vigentes. Además, la SIC subrayó que los consumidores no tienen los medios para detectar esta alteración en la leche, lo que compromete su derecho a elegir un producto acorde con sus expectativas de calidad.
¿Qué es el lactosuero y por qué genera controversia?
El lactosuero es un líquido amarillento que se obtiene durante la producción de queso y mantequilla. Compuesto en un 94% por agua, también contiene proteínas, lactosa, minerales y vitaminas solubles, lo que ha llevado a la industria alimentaria a aprovecharlo como insumo en la fabricación de productos como galletas, chocolates, yogures y salsas. Sin embargo, su adición en la leche sin declarar altera su composición nutricional, generando preocupación en los consumidores.
De acuerdo con la normativa colombiana, la leche entera destinada al consumo humano no debe contener lactosuero. Su inclusión no solo modifica el valor nutricional del producto, sino que también representa una práctica engañosa, ya que se vende bajo estándares de calidad que no cumple.
Hallazgos del INVIMA y sanciones de la SIC
Las investigaciones del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA) revelaron altos niveles de caseinomacropéptido (CMP) en las muestras de leche analizadas, lo que confirmó la presencia de lactosuero en los productos de las empresas sancionadas. Este hallazgo fue clave para la decisión de la SIC, que concluyó que las compañías incurrieron en actos de engaño, afectando la transparencia en el etiquetado y la libre elección de los consumidores.
Las sanciones impuestas incluyen:
- Multas económicas por un total de 21.000 millones de pesos.
- Medidas correctivas para garantizar el cumplimiento de las normativas sanitarias.
- La obligación de ajustar la información en los empaques para reflejar con precisión los ingredientes utilizados.
Cabe destacar que, si bien Sabanalac también usó lactosuero en su leche entera, la SIC determinó que no obtuvo una ventaja competitiva indebida, por lo que su sanción fue menor en comparación con las demás compañías.
Riesgos para la salud y el derecho del consumidor
Si bien el lactosuero no es perjudicial para la salud, su uso no declarado en la leche puede reducir el valor nutricional esperado por los consumidores. Esto es especialmente preocupante en poblaciones que dependen de la leche como fuente principal de proteínas y minerales esenciales. La falta de información en el etiquetado impide que los ciudadanos tomen decisiones informadas sobre su alimentación y vulnera su derecho a recibir productos en conformidad con los estándares de calidad prometidos.
El fallo de la Superintendencia de Industria y Comercio marca un precedente en la regulación de la industria alimentaria en Colombia. La transparencia en el etiquetado y el respeto a las normativas sanitarias son fundamentales para proteger a los consumidores y garantizar una competencia justa en el mercado.
Las empresas sancionadas aún tienen la posibilidad de apelar la decisión, pero la polémica ha reavivado el debate sobre la necesidad de fortalecer los controles de calidad en la industria láctea y mejorar la supervisión de los productos que llegan a la mesa de los colombianos.

La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) impuso millonarias sanciones a las empresas Gloria, Lactalis, Hacienda San Mateo y Sabanalac tras descubrir que comercializaban leche con lactosuero sin informarlo a los consumidores.
La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) de Colombia ha impuesto sanciones por más de 21.000 millones de pesos a cuatro compañías del sector lácteo por prácticas engañosas en la comercialización de sus productos. Gloria, Lactalis, Hacienda San Mateo y Sabanalac fueron señaladas por vender leche etiquetada como entera higienizada, cuando en realidad contenía lactosuero, un subproducto derivado del queso, afectando así la transparencia del mercado y la confianza de los consumidores.
El uso no declarado de lactosuero permitió a estas empresas reducir costos, obteniendo ventajas competitivas desleales frente a otras compañías que cumplen con las regulaciones sanitarias vigentes. Además, la SIC subrayó que los consumidores no tienen los medios para detectar esta alteración en la leche, lo que compromete su derecho a elegir un producto acorde con sus expectativas de calidad.
¿Qué es el lactosuero y por qué genera controversia?
El lactosuero es un líquido amarillento que se obtiene durante la producción de queso y mantequilla. Compuesto en un 94% por agua, también contiene proteínas, lactosa, minerales y vitaminas solubles, lo que ha llevado a la industria alimentaria a aprovecharlo como insumo en la fabricación de productos como galletas, chocolates, yogures y salsas. Sin embargo, su adición en la leche sin declarar altera su composición nutricional, generando preocupación en los consumidores.
De acuerdo con la normativa colombiana, la leche entera destinada al consumo humano no debe contener lactosuero. Su inclusión no solo modifica el valor nutricional del producto, sino que también representa una práctica engañosa, ya que se vende bajo estándares de calidad que no cumple.
Hallazgos del INVIMA y sanciones de la SIC
Las investigaciones del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA) revelaron altos niveles de caseinomacropéptido (CMP) en las muestras de leche analizadas, lo que confirmó la presencia de lactosuero en los productos de las empresas sancionadas. Este hallazgo fue clave para la decisión de la SIC, que concluyó que las compañías incurrieron en actos de engaño, afectando la transparencia en el etiquetado y la libre elección de los consumidores.
Las sanciones impuestas incluyen:
- Multas económicas por un total de 21.000 millones de pesos.
- Medidas correctivas para garantizar el cumplimiento de las normativas sanitarias.
- La obligación de ajustar la información en los empaques para reflejar con precisión los ingredientes utilizados.
Cabe destacar que, si bien Sabanalac también usó lactosuero en su leche entera, la SIC determinó que no obtuvo una ventaja competitiva indebida, por lo que su sanción fue menor en comparación con las demás compañías.
Riesgos para la salud y el derecho del consumidor
Si bien el lactosuero no es perjudicial para la salud, su uso no declarado en la leche puede reducir el valor nutricional esperado por los consumidores. Esto es especialmente preocupante en poblaciones que dependen de la leche como fuente principal de proteínas y minerales esenciales. La falta de información en el etiquetado impide que los ciudadanos tomen decisiones informadas sobre su alimentación y vulnera su derecho a recibir productos en conformidad con los estándares de calidad prometidos.
El fallo de la Superintendencia de Industria y Comercio marca un precedente en la regulación de la industria alimentaria en Colombia. La transparencia en el etiquetado y el respeto a las normativas sanitarias son fundamentales para proteger a los consumidores y garantizar una competencia justa en el mercado.
Las empresas sancionadas aún tienen la posibilidad de apelar la decisión, pero la polémica ha reavivado el debate sobre la necesidad de fortalecer los controles de calidad en la industria láctea y mejorar la supervisión de los productos que llegan a la mesa de los colombianos.